lunes, 27 de mayo de 2013

Revolución

Ha sido la primera noche sin Rocío en la habitación. Después de casi 5 meses, esta noche ha dormido solita. Deseando dormir del tirón y sin embargo son de las cosas que te hacen sentir un pequeño vacío, como si dejaras algo atrás... y es que los niños cuando llegan lo primero que te revolucionan es la habitación, y deja de ser tu espacio de sosiego, intimidad y descanso. Empezando por la cuna que que reduce tu espacio vital, lo pañales, toallitas, chupetes y demás que se instalan en los cajones, y tu habitación que se convierte en un lugar de peregrinaje de todos los amigos y familiares que vienen a ver al bebe: "y estas cortinas, ¿dónde las has comprado? y los muebles, ¿son nuevos? oye pues la cuna no te queda tan encajada, ¿ no?"...y lo que antes era un " buenas noches cariño, que descanses, te quiero" se convierte en un "yo no puedo más (cariño), esta noche te levantas tú, (te quiero)".
Y así pasa un mes y otro mes... hasta que un día dejan la habitación... y te das cuenta de que aunque han sido meses de cansancio y sueño irrecuperable,  la dejan llena de momentos felices, de ternura, de risas y alegría, de felicidad absoluta...y piensas: ¡bendita revolución!